Excepto por la ocurrencia de algún cataclismo sideral, no se van a acabar el agua y el aire - pero su “valor de escasez”, que es lo importante, subirá. Las proyecciones del calentamiento global son que, para el año 2100, si la temperatura promedio sobre 4👁🗨C , 3,000 millones de personas quedarán permanentemente desplazadas y partes del planeta no serán aptas para la supervivencia (incluyendo Ecuador). 80 años nos separan de esa fecha, y si algún asteroide no nos pega primero, estamos a la vuelta de la esquina. Cuando pienso que en mi tiempo de vida me he vinculado con personas que nacieron en tres siglos diferentes, y hoy tengo 74 años, me es muy fácil imaginar que las siguientes décadas pasarán en un santiamén. Las externalidades, desde botar basura a la calle, hasta contaminar el planeta con radioactividad, son temas que tienen implicaciones económicas pero no son arbitrados por el mercado. Es el tema de mi columna. fxs 21.11.28