Redacción Código Vidrio
Roberto Salas Guzmán, ministro de Energía y Recursos Naturales no Renovables designado por el presidente Guillermo Lasso, fue directivo, hasta el 21 de mayo pasado, de la compañía Adventus Mining Corporation, que tiene entre sus inversionistas al grupo Nobis, de la empresaria Isabel Noboa.
Adventus, domiciliada en Toronto, Canadá, opera en el Domo, un rico depósito masivo de sulfuros, parte del proyecto Curipamba, que contiene importantes reservas de cobre, zinc y plomo. Está localizado en las provincias de Los Ríos y Bolívar y se encuentra en fase de exploración.
El 20 de mayo pasado, el presidente Lasso confirmó que Salas lideraría el Ministerio de Energía, con énfasis en proyectos de reactivación. Minutos después del anuncio, el CEO y presidente de Adventus, Christian Kargl-Simard, escribió en su cuenta en Twitter que el ministro Salas es uno de los miembros de la junta directiva de la compañía. Luego, borró su tuit.
A los pocos minutos de que el presidente Lasso anunciara que Roberto Salas era el nuevo ministro de Energía, el CEO de la minera Adventus, Christian Kargl-Simard, escribió un tuit indicando que era uno de los directivos de su compañía. Luego borró el mensaje.
Al siguiente día -el 21 de mayo- Salas renunció a sus roles como vicepresidente y CEO del grupo Nobis, así como al cargo de director, sin funciones ejecutivas, en Adventus.
El 25 de mayo, la empresa canadiense emitió un comunicado anunciando la salida de Salas, en vista de sus nuevas funciones públicas.
Roberto Salas se integró a la junta directiva de la minera desde enero de este año, en representación del Consorcio Nobis, donde era director ejecutivo y vicepresidente, en reemplazo de Roberto Dunn.
El Consorcio Nobis es accionista de Adventus desde 2019. En mayo de ese año, compró 5,4 millones de dólares en acciones, es decir el 9,9% del portafolio accionarial total de la firma. A su vez, la compañía canadiense, cuyas operaciones mayores están en Ecuador, tiene un acuerdo con Salazar Resources Limited, para la exploración de Curipamba y dos proyectos más (Pijilí y Santiago con reservas de cobre y oro). En la sociedad, Adventus tiene una participación del 75% y Salazar del 25%.
Curipamba comprende varias concesiones: Las Naves, Las Naves 1, Las Naves 2, Las Naves 3, las Naves 4, Las Naves 5. El Ministerio de Ambiente otorgó licencia ambiental a casi todas ellas, con excepción de Las Naves 4.
Salas compró acciones por 782.500 dólares
Salas no solo fue directivo de la minera canadiense. También compró un paquete de acciones valorado en 782.500 dólares, según el documento de convocatoria a Junta de Accionistas, emitido el 4 de mayo anterior que revisamos. Las acciones están a nombre de la firma Feslery S.A., controlada por el ministro designado.
Hasta el miércoles 26 de mayo, Salas no se posesionaba oficialmente en el cargo. Código Vidrio lo llamó a su celular y le envió mensajes, para confirmar si vendió o cedió sus acciones. No respondió a nuestros requerimientos.
En enero pasado, Adventus anunció la incorporación de Salas a su directorio. También confirmó que el ejecutivo compró 800.000 acciones en esa empresa.
El ministro es economista, exdirector ejecutivo y miembro del directorio de varias corporaciones multinacionales en Chile, Brasil y Ecuador, donde ha destacado. Fue profesor en la Universidad Católica de Guayaquil, tiene un MBA de Esade-Adolfo Ibáñez Business School y estudió programas de gestión en Wharton y Kellogg Business Schools.
Fuentes del sector Energético se mostraron preocupadas porque una vez que Salas asuma el cargo pudiera incurrir en un conflicto de interés, tomando en cuenta que ese Ministerio es el ente regulador en materia minera.
El Código de Ética emitido por el presidente Lasso indica, en su artículo 10, que “las personas designadas para ejercer los cargos señalados en el artículo 2 de este Decreto Ejecutivo deberán declarar, previo a posesionarse en sus cargos, si se encuentran en una situación en que sus intereses particulares podrían entrar en conflicto con los intereses de las entidades de la función ejecutiva, donde vayan a prestar sus servicios o desempeñar sus cargos”.
Se entiende por conflicto de interés entre los deberes públicos y los intereses privados de un servidor público -detalla el Código- “cuando una persona puede perder independencia u objetividad para tomar decisiones debido a que las mismas podrían razonablemente afectar, positiva o negativamente, a terceros vinculados a dicha persona o a ella misma”.
La Constitución también regula el posible conflicto de interés. El artículo 232 indica: “No podrán ser funcionarias ni funcionarios ni miembros de organismos directivos de entidades que ejerzan la potestad estatal de control y regulación, quienes tengan intereses en las áreas que vayan a ser controladas o reguladas o representen a terceros que los tengan. Las servidoras y servidores públicos se abstendrán de actuar en los casos en que sus intereses entren en conflicto con los del organismo o entidad en los que presten sus servicios”.
No obstante, especialistas de temas mineros consultados por este medio en Canadá advirtieron que Salas no ocupaba ninguna posición ejecutiva en Adventus, sino un rol directivo. Un analista domiciliado en ese país recalcó que Salas renunció por un tema de transparencia. La empresa minera cotiza en la Bolsa de Valores de Toronto, que controla, precisamente, los conflictos de interés y evita que se cometan hechos de corrupción. “Las mineras canadienses están bajo un enorme escrutinio”.
El último 4 de mayo, mediante un documento de 44 páginas, los accionistas de Adventus fueron convocados a la Junta anual, que se realizará el 10 de junio próximo. Fuentes del sector confirmaron a este portal que la situación accionarial de Salas en la minera sería conocida en esa cita.
Illescas asesora al Ministro
Fuentes del Ministerio de Energía comentaron que los últimos días Salas mantuvo dos reuniones con el exministro René Ortiz, para conocer aspectos medulares de esa cartera de Estado. En el equipo asesor del Ministro, que ha participado en las reuniones de transición, está Rebeca Illescas, quien ocupó cargos directivos en los gobiernos de Rafael Correa y Lenin Moreno. La última reunión en el Ministerio de Energía se realizó el martes 25 de mayo.
Illescas tiene experiencia en políticas públicas para inversión y financiamiento en sectores estratégicos (minería, energía, recursos hídricos, hidrocarburos, ambiente, telecomunicaciones).
En 2013, Illescas se incorporó al gobierno de Rafael Correa. Fue asesora de Ecuador Estratégico, hasta 2015. Luego lideró la Coordinación General de Financiamiento en el Ministerio Coordinador de Sectores Estratégicos, hasta 2016. El exvicepresidente Jorge Glas, preso por corrupción, lideró estas áreas, junto con Rafael Poveda.
El año siguiente, en la administración de Lenín Moreno, fue nombrada viceministra de Minería, brazo derecho del entonces ministro Javier Córdova, con quien llevaron adelante los procesos de adjudicación de concesiones mineras. Córdova, quien tras dejar el gobierno fue contratado como CEO por la minera canadiense Soma Gold, es investigado por la Fiscalía por un presunto perjurio y enriquecimiento ilícito.
Tras la salida de Córdova, en diciembre de 2017, Illescas asumió la titularidad del Ministerio de Minería, donde estuvo hasta julio de 2018. Luego pasó al sector privado: es directora de Asuntos Corporativos en el Grupo Cobra Ecuador, transnacional especializada en ingeniería, instalación y mantenimiento industrial de infraestructuras, redes de agua, gas, electricidad y comunicaciones.
Al ser consultada por este portal, Illescas confirmó: “yo únicamente he acompañado en el proceso de recibir información y traspasar al equipo de gobierno”.