sábado, 18 de diciembre de 2021

Guillermo Lasso, la única explicación que queda es que eres "salado"

Aunque no queramos admitirlo, muchas veces nuestras acciones o intenciones no son puras ni positivas, y tarde o temprano vamos a pagar las consecuencias. 

¿Ha quizá saboteado a alguien? ¿Inventado o propagado rumores? ¿Deseado mal a alguien? ¿Peleado en malos términos con otra persona? ¿Mentido o engañado a otros? ¿Dañado propiedad ajena? ¿Huido de sus responsabilidades?

Este procedimiento funesto, utiliza la sal como principal ingrediente para provocar la mala suerte en una persona. Debido al uso del elemento sal, la salación generalmente se relaciona con el plano económico y las propiedades (bienes) de la víctima. El individuo “salado” pierde su poder adquisitivo, contactos y recursos.

Recuerdas aquellas famosas mentiritas piadosas que creemos inofensivas, pues también entran en la categoría de mentiras y si se vuelven frecuentes, pueden traer muchos problemas.

 


A continuación, los tipos más comunes de personas mentirosas para que los identifiques y no caigas en su trampa.

El ser mentiroso frecuente: Esta tan acostumbrado a mentir que los engaños hacen parte de su vida cotidiana. No recuerda bien lo que dijo ni le da mucha importancia y para salir del paso inventa una mentira tras otra.

El hombre mentiroso eventual: Este tipo de hombres mienten solo de vez en cuando con la intención de divertirse o bien para salir del paso frente a una situación o pregunta incómoda.

El hombre mentiroso compulsivo: Miente sin control, así la verdad sea simple de decir; además, hace creer lo que dice y se cree sus propias mentiras como si fueran datos verdaderos. Las mentiras de este tipo se convierten en una condición crónica, a tal punto que los mentirosos sienten placer al engañar.

El hombre mentiroso gradual: Estos chicos analizan y planean cada una de sus mentiras y las sincronizan con expresiones verbales y lenguaje corporal para darles mayor veracidad. La mayoría de sus víctimas les creen sus mentiras por un buen tiempo, pero cuando sienten que van a quedar en evidencia, buscan nuevas víctimas y el drama empieza de nuevo.

El hombre mentiroso aparente: El que es mentiroso por aparentar, teme mostrarse tal y como es, por tanto, te presumirá sobre su exitoso trabajo, sus maravillosos viajes, su círculo de amistades, su sueldo, etc. Son hombres que tienen mucho cuidado con respecto a las mentiras que dicen; así que son muy astutos y maestros del engaño.

Hay expresiones que pueden darte pistas para saber cómo descubrir a un hombre mentiroso, como es el caso de aquellas que son ambiguas del tipo: esperen, probablemente, quizá, casi seguro, tal vez, a lo mejor, posiblemente, etc.

El uso de dichas expresiones, pueden indicar que la persona te está ocultando algo y, para no comprometerse demasiado, emplea la ambigüedad.

Además, los mentirosos cambian de repente de tiempo verbal; por ejemplo, empiezan hablando en pasado y terminan expresándose en presente, lo cual ocasiona que, de una u otra manera, se filtre la verdad.